Hoy en Cocina con David vamos a preparar "Pollo a la Coca-Cola".
Ya había oido hablar de esta receta antes, pero nunca antes había cocinado con Coca-Cola, el resultado ha sido excelente. Una receta muy fácil de preparar, ya que se necesitan pocos ingredientes y en pocos pasos está hecha. Yo he hecho mi versión ya que la que está por internet no me atrae demasiado. En la mayoría usan "sopa de cebolla de sobre" la cual he querido evitar, dando mi versión y mi toque más casero. Las cantidades son variables a los gustos de cada uno y a la cantidad de pollo que tengamos.
Empezaremos con la receta y espero que os guste mi versión, el resultado es realmente rico. A continuación os dejo el vídeo de la receta:
Ingredientes
- Pollo
- 2 cebollas
- 1 pastilla de caldo
- Kétchup
- 1 lata de cocacola
- Sal
- Pimienta
- Aceite
Elaboración:
- Empezaremos salpimentando el pollo. En este caso eh usado alitas de pollo y dos muslos pequeños, pero se puede hacer con las partes que más os gusten, siempre y cuando tengan el mismo tamaño para que se cocinen a la vez.
- En un cazo con un poco de aceite, vamos colocando el pollo y lo vamos dorando por lo dos lados a fuego fuerte.
- Mientras se dora el pollo cortaremos la cebolla en juliana.
- Una vez que el pollo esté dorado lo reservamos en un bol aparte.
- Bajamos el fuego y en el mismo cazo que hemos dorado el pollo añadimos la cebolla, la salpimentamos y mezclamos bien, vamos pochandola a fuego medio.
- Cuando veamos que la cebolla este mas o menos blandita, añadimos la pastilla de caldo troceada, un chorrito de ketchup (aproximadamente 2 o 3 cucharadas) y mezclamos bien el ketchup con la cebolla.
- Añadimos el pollo que teníamos reservado, y cubrimos con la Coca-Cola. lo cocinaremos a fuego medio bajo de 15 a 30 minutos.
- Durante la cocción iremos mezclando y dando vueltas al pollo, el pollo se debe cocinar y la salsa debe reducir, quedando cremosa
Y ya tenemos listo nuestro pollo a la Coca-Cola. Es muy sabroso con un toque ligero agridulce que me recuerda al de al barbacoa pero sin ser el mismo, un sabor diferente pero realmente rico.